Llego al debajo de la tierra
Piedras húmedas
Conciencias mohosas
Estado de suspensión.
El paisaje se muestra en dinámica
Por el momento alguien pregunta
¿de quién es la mano
Que derramó tanta sangre?
Y una revoltura de sutilezas desgarra el silencio
Mediante un murmullo de perfil particular.
Aquí todos sabemos el origen del límite
Hay una impostura no clara
Como llevar un pañuelo en la boca
Un inverosímil arquitectura de mirar las cosas
A medida que el mismo viento
Ha superado los años y la felicidad
De las últimas lluvias.
En la esquina de los abismos
Esperándome estuvieron
Octogenario anciano con las manos en la cara
Mujer artista aspirando el tabaco
“no hacer caso al signo pare”
Continuaron su camino.